Antes se manejaba de forma privada como Ávila Mágica pero se le quitó la concesión y desde entonces es manejado por el Ministerio de Turismo. Aquí viene mi crítica, siendo privado ciertamente el costo de las entradas era más elevado y lo que vendían en todo el espacio de las caminerías era algo costoso. Recuerdo haber hecho en ese momento el recorrido dentro del Hotel Humboldt por el que se tenía que pagar algo adicional, se hacía por grupos con un guía y te llevaban por todas las áreas recuperadas. Una verdadera maravilla es un tesoro tomando en cuenta que el hotel fue construido hace muchísimos años y se mantiene ahí intacto.
Hay que ser realistas y sinceros, he ido progresivamente desde que el teleférico es manejado por el Gobierno actual y he observado que en vez de mejorar...empeora. Muy muy tristemente. Lo bueno es que los precios de las entradas y los productos son accesibles pero por otro lado la atención turística es pésima. Al llegar arriba sólo te queda comer y caminar porque el paseo dentro del hotel ya no lo hacen de hecho solo puedes accesar a la planta baja. Y todo lo demás? te lo perdiste así de sencillo. Arriba de la arepera socialista hay un restaurant de fondue que está muy lejos de ser popular porque llegue a ver un plato que costaba más de 250bs. Además está bien descuidado al igual que otro que está abajo antes llamado Cumbé si no me equivoco, entre y estaban los mesoneros escuchando reguetón =S
No sé si es que la mejor atención la dejan sólo para sábados y domingos...
No hay comentarios:
Publicar un comentario